jueves, 20 de octubre de 2011

Un final sin final


La frase que titula esta entrada es de Jaime Mayor Oreja quien pronosticó, una vez más con acierto, lo que ha sucedido hoy. La banda terrorista ETA anuncia "el cese definitivo de la actividad armada" en un comunicado publicado por el diario proetarra Gara.

En el escrito vomitado por los terroristas se puede leer que "ETA hace un llamamiento a los gobiernos de España y Francia para abrir un proceso de diálogo directo que tenga por objetivo la resolución de las consecuencias del conflicto y, así, la superación de la confrontación armada". Pero, ¿en qué quedamos? ¿En que proclaman el cese definitivo de la actividad armada o en que la superación de la confrontación armada se logrará tras el proceso de diálogo abierto con Madrid y París con el horizonte de un referéndum independentista? Yo me decanto por esto último. Y creo que no soy el único.

Pero en el texto escupido por los encapuchados no se lee nada de la entrega de las armas. No se lee nada de arrepentimiento por tantas víctimas, más de 850. No se lee nada de pedir perdón a las familias de los centenares de asesinados por la barbarie terrorista. Y no se lee nada de que los terroristas con delitos de sangre se entreguen y cumplan condena. En la actualidad hay más de 300 atentados sin resolver. Precisamente hoy hemos conocido el archivo de la causa por el atentado de Irene Villa y su madre "ante la falta de autor desconocido". Por suerte, Irene Villa está viva y ha pasado página, tal y como ha asegurado a los micrófonos de esRadio.

Valoraciones políticas

Y tras el enésimo comunicado han llegado las reacciones de los políticos. El primero, Zapatero. El todavía presidente del Gobierno ha trasladado al próximo Ejecutivo la responsabilidad de continuar con el proceso. Pero antes de esto ha dicho que "la unidad de los partidos democráticos, españoles y vascos, vascos y españoles, ha resultado decisiva para alcanzar este final". Hagamos memoria o, mejor, se la refrescamos al presidente. José Luis Rodríguez Zapatero dijo el 26 de febrero de 2008 en una entrevista en La Sexta que para que pudiera haber un "escenario distinto", esto es, una nueva negociación con ETA sólo valdría "una declaración de final definitivo, total y absoluto del fuego y de entrega de las armas". Ahora al inquilino de La Moncloa le vale con el cese definitivo de la violencia. De la entrega de las pistolas y los explosivos ni una palabra.

Tomaba el testigo Rubalcaba, que también ha hablado de unidad. Alfredo P. dice que "la unidad de todos los demócratas es la clave de esta victoria y debe ser la clave para los tiempos que vienen". Al candidato socialista a la presidencia del Gobierno también le falla la memoria. Se olvida de que fue su partido, el PSOE, y su Gobierno, el de Zapatero, el que firmó en el año 2000 el Pacto por las libertades y contra el terrorismo. Se sentaba a firmarlo con el Partido Popular, por un lado, y se sentaba para negociar con ETA, por otro. Pero no fue el único momento en el que rompió ese pacto que, de haberse cumplido a raja tabla, habría acabado con ETA mucho antes, porque ahora no está disuelta ni mucho menos. También se saltó el pacto a la torera incluso después del atentado de la T4 que se cobró la vida de Carlos Alonso Estacio y Diego Armando Palate. No lo digo yo. Lo dijo Zapatero en una entrevista en el diario El Mundo el 13 de enero de 2008.

Además, Rubalcaba, que se veía contra las cuerdas en el combate electoral según todas las encuestas, tenía este as debajo de la manda. O eso deduzco de las palabras pronunciadas el 12 de agosto de este año en un mitin en la localidad madrileña de Galapagar: "Nunca desde el 77 hemos hecho una campaña donde no haya estado la sombra de ETA. En ésta no". Añadió que las elecciones del 20-N son las primeras en las que no hay "temor a un atentado" de la banda terrorista. Dicho y hecho.

Y el último en comparecer ante los medios ha sido el presidente del PP. Mariano Rajoy, en un discurso marcado por la prudencia, se ha atrevido a decir que "este anuncio se ha producido sin ningún tipo de concesión política". Para ser justos, he de decir que Zapatero también ha dicho que se ha producido "sin condiciones". Entonces, ¿la presencia de Bildu en las instituciones qué es? Porque no es la primera vez que esto sucede. En las elecciones de 2007, la franquicia de ETA, Acción Nacionalista Vasca (ANV), obtuvo más de 400 concejales. Por no hablar de las múltiples concesiones que ha hecho el Gobierno de Zapatero a los presos de ETA, o de la Conferencia de Paz de San Sebastián en la que se equipara a víctimas y verdugos.

La voz de las víctimas

Ante estos comentarios, siempre nos quedará la voz de las víctimas del terrorismo. Desde Voces Contra el Terrorismo creen que "es una pantomima, un insulto a las víctimas del terrorismo y el resultado de una negociación" del Gobierno con la banda criminal. Desde Dignidad y Justicia aseguran que "no se puede hablar de una disolución si no hay una entrega de armas y una entrega de los perseguidos por la Justicia. Un simple llamamiento y unas palabras no son suficientes. No se puede creer a quien no entrega las armas".

Sólo nos queda esperar para ver qué pasos da la banda terrorista ETAdisfradado de hermanitas de la caridad. Lo que sí espero es que no se produzca una escisión dentro de la banda que opte por seguir con los atentados tal y como ha ocurrido con el IRA en Irlanda del Norte.

martes, 24 de mayo de 2011

El PSOE no quiere primarias, quiere a Rubalcaba



En pleno debate sobre la conveniencia o no de que Zapatero convoque elecciones anticipadas, el PSOE se debate en si hacer o no unas primarias para elegir un candidato que pueda hacer frente a esta marea azul que recorre España. En el seno del partido socialista la división creada por la debacle electoral en las elecciones municipales y autonómicas se hace palpable cuando se piensa en la sucesión a Zapatero.

Pero opiniones hay para todos los gustos. José Blanco avisa de que no quiere acuerdos entre bambalinas, Tomás Gómez piensa que los dirigentes socialistas no quieren el "dedazo" de Aznar. Otros como Gaspar Zarrías creen que lo mejor sería una única candidatura en las primarias del PSOE o Juan Carlos Rodríguez Ibarra que considera que estos comicios internos son lo menos indicado. Unas primarias cuyo calendario quedará fijado este sábado en la reunión del Comité Federal y en el que, de momento, Alfredo Pérez Rubalcaba y Carmen Chacón, los dos nombres que se barajan para disputarse las primarias, guardan silencio.

Los que no se callan son los grandes derrotados en las elecciones del 22-M. Zapatero fue el primero en reconocer la derrota y en hacer autocrítica aunque se niega a dejar el cargo bajo la premisa de acabar con unas reformas que devuelvan a España a la senda del crecimiento económico. Pero el propio Zapatero está deslegitimado para realizar unas medidas de ajuste ya que cuenta con el rechazo de gran parte de la sociedad española que ha mostrado su descontento en las urnas.

Zapatero se aferra al poder con un objetivo a largo plazo: Quiere dejar España y nuestra economía como un solar. Quiere que el nuevo presidente del Gobierno, previsiblemente Mariano Rajoy, tenga que emprender unos ajustes tan drásticos que saquen a los españoles a la calle para protestar. Esa legislatura del PP será complicada y Zapatero confía en que el desgaste será mayúsculo por lo que el PSOE estará en disposición de volver a La Moncloa en las elecciones de 2016 como muy tarde.

Pero antes de que todo esto pase, los socialistas quieren una reflexión para saber qué les ha hecho caer tan bajo en las elecciones. José María Barreda, todavía presidente de Castilla-La Mancha, plantea una revisión ideológica del PSOE que no se limite a unas primarias. Carmen Chacón o Gaspar Zarrías consideran que este severo castigo obliga a una reflexión profunda en la sede de la calle Ferraz. A algunos como Rodríguez Ibarra no les vale con el Comité Federal que decida el calendario a seguir y piden un Congreso para que el PSOE "salga del atolladero".

En el partido socialista no quieren peleas internas para buscar un sucesor a Zapatero y son muchos los que quieren unas primarias para aclamar al actual vicepresidente primero y ministro del Interior. Con los antecedentes de Alfredo Pérez Rubalcaba: portavoz del Gobierno de los GAL, portavoz del PSOE durante los atentados del 11-M con "jornada de reflexión" incluída y ministro del Interior durante el chivatazo a ETA del bar Faisán, si llega a la Presidencia del Gobierno... que Dios nos coja confesados.

lunes, 23 de mayo de 2011

Nada que celebrar



Los españoles decidieron ayer en las urnas dar carpetazo a siete años de Zapatero. Años de paro y crisis económica. A pesar de que el PSOE ha sido borrado prácticamente del mapa electoral español, el presidente del Gobierno se empecina en seguir en La Moncloa. Lo confirmó ayer aunque son pocos los que creen que pueda mantenerse en el poder hasta marzo del año que viene.

En el otro lado de la balanza, el PP, celebra los resultados como agua de mayo. Un espaldarazo que consideran clave para llegar a la Presidencia del Gobierno. Los populares confían en llegar al Palacio de La Moncloa por la puerta grande y con unos resultados tan históricos como los obtenidos en las elecciones municipales y autonómicas.

El PSOE llora y el PP ríe. Desde la madrileña calle Génova, sede central de los populares, los simpatizantes que celebraban con sus líderes los resultados pedían a Rajoy la expulsión de los proetarras de las instituciones al grito de "Bildu fuera". El presidente del PP, lejos de atender a las peticiones de los suyos, se limitó a decir a los españoles que no les han votado que van a gobernar para todos. Ni una palabra de ETA-Bildu.

Tuvo que ser la presidenta de la Comunidad de Madrid la que, en rueda de prensa, repitiera lo dicho durante toda la campaña, que le parecía "lamentable" que Bildu estuviera en las instituciones. Gracias a la inacción del Gobierno y del politizado Tribunal Constitucional ETA vuelve a los ayuntamientos. Da lo mismo que la Fiscalía General del Estado, la Abogacía del Estado y el Tribunal Supremo, con informes policiales que atestiguan que Bildu es ETA, estuvieran en contra de que los proetarras estuvieran en estas elecciones. Ahora, Bildu se erige como la primera fuerza política en el País Vasco por número de concejales, al lograr 953 ediles, y la segunda en porcentaje de votos al conseguir el 25% de los sufragios o, lo que es lo mismo, 276.134 votos. Con estos números, Bildu gobernará en 88 municipios vascos y navarros y es mayoría en otros 25.

¿Qué significa esto? En términos económicos, los proetarras recibirán del Estado y del bolsillo de todos los españoles vía impuestos unos 18 millones de euros gracias a los votos logrados y las actas de concejales. Por cada acta recibirán una subvención de casi 277 euros y 55 céntimos por votos recibidos.

Un día negro

Las víctimas del terrorismo califican este 23 de mayo de 2011 como "un día negro". Francisco José Alcaraz, presidente de Voces Contra el Terrorismo, asegura que "ETA ha ganado porque el proyecto político por el que han muerto muchos españoles el Gobierno de Zapatero les ha abierto las puertas". En la misma línea se ha pronunciado la presidenta de la Asociación de Víctimas del Terrorismo. Ángeles Pedraza lamenta que "después de 30 años poniendo muertos sobre la mesa para acabar con esto, al final no han dejado de matar, no se ha disuelto la banda y ahora se han hecho más fuerte gracias a este Gobierno".

Pero si había un bastión de la libertad en el País Vasco hasta ayer era Lizarza. Aquel reducto liderado por Regina Otaola durante cuatro años ha vuelto a manos de los proetarras que han conseguido los siete concejales en juego. Para la todavía alcaldesa de Lizarza: "el País Vasco ha perdido grandes dosis de libertad". Otaola está convencida de que la negociación entre el Gobierno y ETA sigue avanzando y esto "es un premio a los etarras".

Pierde el PSOE, gana el PP y gana ETA. Una mala noticia, ésta última, para España y para la libertad.

viernes, 29 de abril de 2011

UEFA y Barça vs Real Madrid

Lo vivido en el estadio Santiago Bernabéu en el partido de ida de la semifindal de la Champions League deja muy mal sabor de boca a los aficionados al fútbol. Primero, por el planteamiento rácano e indigno de un equipo campeón como el Real Madrid. Segundo, por la escenificación de una obra de teatro perfectamente orquestada por el Barcelona antes del choque contra el Madrid.

Todo comenzó en el mismo escenario, en el coliseo de la Castellana. En aquella ocasión el Real Marid se enfrentaba al Tottenham en los cuartos de final de la Liga de Campeones. Esa noche, los Spurs jugaron casi todo el partido con 10 y el resultado fue definitivo, Madrid 4 - Tottenham 0. Entonces, José Mourinho dijo que a ese nivel era muy difícil jugar 11 contra 10. Hablaba la voz de la experiencia.

En el partido de vuelta se cumplió el guión y los blancos pasaron a semifinales. Allí les esperaba el Barça. El entrenador merengue se temía lo peor o, mejor dicho, lo habitual. Jugar contra los azulgranas con un hombre menos. Ya lo hizo cuando entrenaba al Chelsea y cuando entrenaba al Inter de Milán.

A medida que se iba acercando el trascendental choque, con prólogo derbi liguero y final de Copa del Rey, el ambiente se caldeaba. Se rumoreó que el árbitro para el primer duelo europeo podría ser un portugués. Entonces, Josep Guardiola dijo que su colega Mou estaría muy contento por esta designación. Al final, la UEFA puso a un árbitro alemán, Wolfgang Stark, considerado el peor colegiado de la Bundesliga y, para más señas, fan de Leo Messi. Primera batalla culé ganada.

En otra rueda de prensa, la mítica de Guardiola en la que se volvió a quitar la careta, esa de caballero que viste de traje a un macarra de barrio. Allí se atrevió a bromear con que ellos jugarían con 11 y que no sabía si el Madrid acabaría con 10. Lo dice después de que los merengues acabaran con un jugador menos el partido de la primera vuelta de la Liga BBVA, con un jugador menos en el encuentrode la segunda vuelta y con un jugador menos en la final de la Copa del Rey. Segunda batalla culé ganada.

Llegó el día D, la hora H, el partido P y el árbitro A. Todo estaba preparado para el gran espectáculo del fútbol y Mourinho con su mal planteamiento de juego y Guardiola con sus actores de cámara lo despreciaron. Tras una primera parte para olvidar llegaba el momento de la verdad. Era el minuto 15 de la segunda parte y el árbitro decidió expulsar a Pepe por un plantillazo a Dani Alves. El propio defensa azulgrana lo celebró en el suelo mientras simulaba retorcerse del dolor y es retirado en camilla. Hay que recordar que en la final de Copa se produjo una falta similar. Entonces fue Busquets el que "agredió" a Xabi Alonso. En aquella ocasión la entrada no mereció ni una tarjeta amarilla.

Pero la de Dani Alves no fue la única actuación memorable de los de Pep. Pedrito fingió una agresión en la cara cuando la falta de Arbeloa era a la altura del pecho. Por no hablar de la soberbia interpretación de Busquets ante un rifirrafe con Marcelo. De nuevo las manos a la cara para picar al árbitro ante la supuesta dureza con la que se estaban empleando los jugadores madridistas. Tanta conducta antideportiva calentó el ambiente y la mente de Stark que entendió como roja una tarjeta amarilla, la que debió ver Pepe.

Con 10, como dijo Mourinho, es muy difícil competir a ese nivel. Fue entonces cuando el Barcelona comenzó a carburar y Messi, liberado de su perro de presa, campó a sus anchas por Chamartín. 2-0 y lío a la vista.

Tras la rajada de Mourinho en rueda de prensa cantando las verdades a los culés por los robos al Chelsea e Inter, el Barcelona estudiaba denunciar al entrandor del Madrid ante la UEFA. Su junta directiva se reúne la tarde siguiente y antes de decidir si denuncia o no a Mou, el organismo del fútbol europeo se adelanta y abre un expediente disciplinario al portugués. También abren expediente a Pinto por una agresión en la entrada del túnel de vestuarios durante el descanso.

Más tarde y ya amparado por la UEFA, el FC Barcelona decide denunciar a Mourinho por sus declaraciones. El Madrid contraataca y decide denunciar al Barça por el comportamiento antideportivo de varios de sus jugadores durante el choque.

Ahora la pelota está en el tejado de la UEFA. Lo que está claro es que los azulgranas tienen ya sacado el billete a Londres para disputar otra ilegítima final de Liga de Campeones. Pero el partido de vuelta será la batalla final. Con un ambiente más enrarecido que nunca el Madrid llegará al Camp Nou con la intención de remontar un 0-2 que parece imposible. Antes de eso decidirá la UEFA las sanciones oportunas por lo acontecido el miércoles 27 de abril de 2011 en el Santiago Bernabéu. Mucho me temo que el Barcelona y sus jugadores se irán de rositas y que el Madrid y su entrenador verán una sanción ejemplar por poner en duda la honestidad de una institución que desde que la preside Platini deja más sombras que luces en sus actuaciones. Se habla de que a Mourinho le pueden caer 7 partidos de sanción y se habla de que los blancos pueden ser advertidos de apartarles de las competiciones europeas si continúan las críticas. Ver para creer.

martes, 5 de abril de 2011

Antología del ZPismo


Era el 14 de marzo de 2004. España seguía conmocionada por la masacre del 11-M y José Luis Rodríguez Zapatero ganaba unas elecciones que tenía perdidas hasta ese fatídico jueves de marzo.

Aparecía ZP a los pies de la sede socialista en la madrileña calle Ferraz con un recuerdo para las víctimas, pronto se olvidaría de ellas, si no lo había hecho ya. Recuerdos también para Mariano Rajoy, el gran perdedor de la noche junto a España. Zapatero anuncia un cambio de talante que “comience esta noche” y deja la primera frase para el recuerdo: “el poder no me va a cambiar”. A medida que han pasado los meses se han ido viendo las promesas incumplidas. Sin olvidar que la sorpresa por el vuelco electoral obligaba al PSOE a retirar de su página web el programa electoral, quién sabe si lleno de utopías socialistas, valga la redundancia.

Talante por delante, Zapatero forma un Gobierno paritario, esto es, con 9 ministros y 9 ministras. Da igual la valía de una o de otro, el caso es que se cumpla lo prometido y lanza otra frase para la antología como la pronunciada en una entrevista en la revista Time: “la igualdad entre sexos es más efectiva contra el terrorismo que la fuerza militar”. Pasan las horas, los días, las semanas y los meses y va gobernando dejándose llevar por la inercia de las dos legislaturas de Aznar. Entre que “tenemos un Rey bastante republicano” y que “disuadir del consumo del tabaco y del alcohol es de izquierdas” se cuela otra reflexión para la historia: “el cambio climático causa más muertes que el terrorismo internacional”. Afirmación más que sorprendente, sobre todo ahora que la teoría del calentamiento global se desmorona como un castillo de naipes entre defensores enriquecidos y detractores perseguidos.

Pero sin duda el caballo de batalla del jefe del Ejecutivo es la lucha antiterrorista. Ya sabemos que antes de que llegara al Gobierno y en plena negociación del pacto antiterrorista estableció contacto con los criminales solo él sabe para qué, aunque poco a poco todos lo vamos sabiendo. Las conversaciones le dan sus frutos y ETA anuncia un alto el fuego permanente, que entrará en vigor el 24 de marzo de 2006, para “impulsar un proceso democrático” en el País Vasco. Las ensoñaciones de Zapatero de alcanzar la paz a toda costa le llevan a poner en riesgo la unidad de España y, como se vería pronto, facilitar que la banda terrorista siga en los ayuntamientos vascos engañado por una tregua trampa.

A penas tres meses más tarde, Zapatero anuncia “que el Gobierno va a iniciar un diálogo con ETA”. El presidente de los españoles nos miente porque todos sabemos que negocia con la banda terrorista desde antes del año 2004, antes del 11-M y antes de que ganara las elecciones generales. ZP sigue en su mundo, entre negociación y concesión a ETA, y toca hacer balance del año 2006. Fue entonces, el 29 de diciembre de 2006, cuando José Luis Rodríguez Zapatero, presidente del Gobierno, afirmó solemnemente que en materia antiterrorista “estamos, por supuesto, mejor que hace cinco años, pero también estamos mejor que hace un año y hoy les expreso una convicción, dentro de un año estaremos mejor que hoy”. Dicho y hecho, la banda terrorista ETA le toma la palabra por no decir el pelo y pone una bomba en la Terminal 4 del aeropuerto de Barajas que acaba con la vida de Diego Armando Estacio y Carlos Alonso Palate.

Compungido, descompuesto y sin novia, Zapatero declara que rompe las negociaciones con ETA y garantiza el 13 de marzo de 2007 que “no hay ningún contacto con ETA”. Nueva mentira. El presidente del Gobierno afirmó casi un año después en una entrevista río concedida al diario El Mundo que “autoricé nuevos contactos con ETA tras el atentado de la T4 debido al deseo de instancias internacionales”. Al presidente y adalid de la calle cuando enarbolada el “No a la guerra” o el “Nunca mais” del Prestige no le sirve ya el llamamiento de la ciudadanía, víctimas incluidas, que manifestación tras manifestación piden al Gobierno “Memoria, dignidad y justicia” y que no se negocie en su nombre con los terroristas. Zapatero llega a decir que “Arnaldo Otegi ha hecho un discurso por la paz” o que “Ignacio de Juana Chaos es de los que están a favor del proceso de paz”. Zapatero se olvida de las víctimas, aquellas que recordó la noche electoral de 2004, y da credibilidad al asesino de 25 inocentes y que en la cárcel pidió "champán, langostinos y tarta" el día que ETA asesinó al edil de UPN Tomás Caballero.

Durante esa tregua trampa se pudieron ver las concesiones del Gobierno a los terroristas con tal de mantener un alto el fuego que le beneficiara electoralmente. Acercó a Otegi a la cárcel de Martutene, liberó a De Juana Chaos que se puso en huelga de hambre y se le pudo ver pasear por las calles de San Sebastián. Ahora está huido de la justicia en Irlanda. También juntó a la Tigresa con su pareja en la prisión de Nanclares de Oca, excarceló a Díaz Usabiaga para cuidar a su madre, a Txelis para dar cursos de formación o a Beloki para someterse a un tratamiento de fertilidad, sin olvidar el chivatazo a ETA para evitar que se detuviera al aparato de extorsión de la banda.

Se acercaba la segunda cita electoral para el presidente del Gobierno y durante la precampaña y campaña electoral los ataques entre los dos partidos se sucedían. El ambiente de crispación beneficiaba al PSOE o eso creía su secretario general y así se lo hizo saber a Iñaki Gabilondo al finalizar una entrevista en el canal Cuatro: “Nos conviene que haya tensión”, Zapatero dixit. Tanta fue la tensión que ETA decidió acabar con la campaña con el asesinato del concejal socialista de Mondragón, Isaías Carrasco. Era un déjà vu, algo que ya habíamos vivido exactamente 4 años antes.

Otra losa que pesará sobre su cabeza es la del Estatuto de Cataluña. Era el 13 de noviembre de 2003, a pocas fechas de las elecciones presidenciales a las que concurría por primera vez como cabeza de serie en las listas del PSOE cuando, en un mitin en Cataluña, dio carta abierta a una reforma cuya mitad de sus texto era inconstitucional: Apoyaré la reforma del Estatuto que apruebe el Parlamento catalán”. Algo que se explica si recordamos que para el presidente del Gobierno nación es un concepto discutido y discutible. El texto que finalmente avaló el Tribunal Constitucional el 28 de junio de 2010 habla de Cataluña como nación, impone el deber de conocer la lengua catalana y la creación de un régimen fiscal específico, entre otras cosas.

De las dos tardes de economía a los 4,7 millones de parados

Es público y notorio que Zapatero llegó a la presidencia del Gobierno con escasos, por no decir nulos, conocimientos de Economía. Prueba de ello la tuvimos antes de ser presidente. El 25 de septiembre de 2003 pronunciaba una conferencia sobre economía en Madrid junto a Jordi Sevilla. El entonces secretario de Economía de los socialistas dijo al secretario general del partido que se le notaba todavía un poco inseguro y que había cometido un par de errores. Terminó diciendo que “lo que tu necesitas saber para esto son dos tardes”. Zapatero contestó: “¿Sabes qué es lo peor?, que me gusta”. Ahora nos explicamos toda la política económica de estas dos legislaturas socialistas. El presidente del Gobierno aprendió economía en dos tardes y así ha ido a España.

Durante la primera legislatura, Zapatero se aprovechó de una etapa de crecimiento nunca vista antes en nuestro país, pero desde el año 2007 los síntomas de que se acababa la buena racha empezaron a asomarse. Desde todo el Ejecutivo negaron una y otra vez que hubiera una crisis que iba a atacar con fuerza las economías de los países desarrollados y, con especial virulencia, la de España. Lo negaron porque se acercaban las elecciones generales de 2008 y el PSOE, que había llegado a La Moncloa, por “accidente”, no quería dejar la poltrona. El ejemplo más claro de que desde el Gobierno se mintió a los españolas se vio en el debate televisado que ofrecieron Pedro Solbes y Manuel Pizarro. El flamante fichaje de Rajoy para llevar el devenir económico del PP puso encima de la mesa todos los síntomas que no dejaban lugar a dudas de que la crisis estaba sobre nuestras cabezas. El vicepresidente de Economía se limitó a descalificar al contrincante sin tomar nota de unas recomendaciones que habrían evitado gran parte de los daños de la crisis que todavía estamos sufriendo.

Ya en marzo de 2007, a un año vista de las elecciones, Zapatero participó en el programa televisivo “Tengo una pregunta para usted”. Allí, en TVE, dio rienda suelta a su demagogia y a su falta de rigor para analizar la realidad que vivían los españoles. Tan alejado estaba que ante la pregunta de “¿Cuánto vale un café en la calle?”, Zapatero respondió: “80 céntimos aproximadamente”. Una afirmación que no pasó desapercibida entre los miles de ciudadanos que se dejaban más de un euro en su consumición diaria.

Al margen de las anécdotas, el presidente del Gobierno sacaba pecho sobre la situación económica de España allí donde estuviera. Con la tasa de paro por debajo del 8% Zapatero seguía soñando: “Lo anunciaré de forma sencilla pero ambiciosa, la próxima legislatura lograremos el pleno empleo en España”. En diciembre de 2007 se propuso “aspirar a acercarnos a los 2 millones de puestos de trabajo en la próxima legislatura”. Pero España empezaba a destruir empleo, cada vez había más parados, desde la oposición le pedían medidas que frenaran la sangría del paro y Zapatero se limitaba a decir que “el pesimismo nunca ha creado un puesto de trabajo”.

El optimista eterno de La Moncloa seguía en sus trece. El 9 de enero de 2008 propone ante los suyos “liderar un mayor esfuerzo colectivo para acercarnos a los 2 millones de empleos nuevos en la próxima legislatura, para situar la tasa de paro entorno al 7%”, hoy tenemos más de 4 millones 700 mil parados y una tasa de paro superior al 20%. Más optimismo, el presidente se defiende de las críticas del partido de la oposición con una frase que, con los números delante, deja claro que su visión de la realidad ha estado y está distorsionada: “La peor previsión de para que podemos tener por delante será siempre una previsión de paro mejor que la que mejor tuvo el Partido Popular”, era el 27 de abril de 2008, ya al frente de su segunda legislatura al frente del Ejecutivo.

Con el paro cada vez más alto, Zapatero llega a decir que los desempleados “no son parados, son personas que se han apuntado al paro”. Una reflexión que sin duda sólo puede venir de alguien que aprendió la teoría económica en dos tardes. Muy poco tiempo en el que sin duda no se puede aprender nada. Lo volvió a dejar claro en una entrevista en La Sexta, cadena creada por Zapatero para sus amigos Roures y compañía. Fue el 26 de febrero de 2008 cuando el presidente del Gobierno, dando la impresión de ir sobrado en la materia dijo: “Pero el Euribor, el precio que marca las hipotecas, lo marca el Banco Central Europeo”. Basta poner el Google “euribor” para saber que es un índice de referencia publicado diariamente que indica el tipo de interés promedio al que las entidades financieras se prestan dinero en el mercado interbancario del euro.

No es la única vez que nuestro presidente del Gobierno ha ido de sobrado. Otro ejemplo lo vimos en septiembre de 2007 cuando “haciendo un símil futbolístico, se puede decir que la economía española ha entrado en esta legislatura en la Champions League de la economía mundial”. También alardeó fuera de nuestras fronteras. En un viaje a Estados Unidos dijo que “quizá España tenga el sistema financiero más sólido de la comunidad internacional”. Sin duda se olvidaba de las cajas de ahorros y de planes como el FROB que tendría que habilitar años después para evitar la quiebra de ese sistema de Liga de Campeones. Pero no quedó ahí su prepotencia. En el mismo foro y en un tono jocoso afirmó que “hemos superado la media europea de la renta per cápita y hemos superado a Italia, cosa que deprime mucho al primer ministro Berlusconi. Nuestro objetivo es superar en renta per cápita a Francia, esto no lo quiere ni oír mi amigo Sarkozy”. Se toma la licencia de llama amigo al presidente galo después de apoyar en su camino a la presidencia a su rival Ségolène Royal con un “Ségolène, siempre estaré a vuestro lado”. También menospreció la victoria de Angela Merkel en Alemania al afirmar que los resultados electorales habían sido un fracaso.

Crisis, ¿qué crisis?

Era septiembre de 2008 y la crisis internacional estaba encima de nuestras cabezas desde hace un año, aunque Zapatero y su oficina económica de La Moncloa o no la veían o hacían por no verla. El caso es que una y otra vez repetían que “no estamos en una crisis económica”, pero poco a poco se iba rindiendo a las evidencias y poco a poco se fue dando cuenta de que no podía seguir engañando a unos españoles que ya sufrían en sus propias carnes los estragos de la crisis. En febrero de 2008 decía que “la economía ha crecido muy bien en los últimos cuatro años y ahora está en un período de desaceleración, no de crisis y menos de recesión”. Fue cinco meses más tarde cuando se atrevió a decir la palabra tabú. Durante una entrevista en Antena 3 se le escapó que “en esta crisis, como ustedes quieren que diga, en esta crisis que se produce hay mucha gente que no va a tener ninguna dificultad”. Una afirmación, esta última, bastante atrevida con un país que se precipita hacia los 5 millones de parados, con más de un millón de familias con todos sus miembros en paro y con otros tantos que ya no reciben ninguna ayuda del Estado por su situación de desempleados.

Pero en fin, después de reconocer la crisis, pronto empezaron a vislumbrar desde el Ejecutivo los “brotes verdes” de nuestra economía. Zapatero lleva año y medio asegurando que “lo peor de la crisis ha pasado ya”, otra mentira porque seguimos metidos en el fango, con nuestra economía casi quebrada y pidiendo limosna para poder financiar nuestra abultada deuda.

Entre medias llegó la negociación con la patronal y sindicatos por la reforma del mercado laboral. Una mesa de diálogo que se iba retrasando a medida que iba siendo más necesario llevar a cabo las reformas estructurales que necesitaba España para no caer más bajo dentro del túnel de la recesión. Al final, los sindicatos de izquierdas, aquellos a los que Zapatero dijo el 1 de abril de 2009 que “necesito vuestro apoyo y necesito vuestro cariño”. Ni lo uno, ni lo otro. Convocaron la primera huelga general contra el líder de los socialistas, algo que llegaba tarde y que lo único que provocó fue paralizar a la fuerza servicios básicos de un país en crisis que no se podía permitir semejante lujo.

Retira las tropas de Irak y las manda a Libia

En materia internacional no le ha ido mucho mejor a ZP, aunque peor es imposible. Comenzó con una promesa cumplida y no por ello menos polémica, la orden dada el 19 de abril de 2004 de que “las tropas españolas destinadas en Irak regresaran a casa”. El “no a la guerra” y el nuevo talante triunfaban a pesar de que la decisión del nuevo inquilino de La Moncloa dejaba nuestras relaciones internacionales por los suelos. Australia llegaría a decir que España se había plegado a las exigencias de los terroristas. Más tarde diría que abandonó Irak porque “la paz exige más valentía y más heroísmo que la guerra”.

Promesa cumplida, pero también varias incumplidas. La primera de ellas la de debatir la retirada en el Congreso de los Diputados. Otra, informar al Consejo de Ministros. En definitiva, Zapatero pasa en poco más de 7 años del No al Sí a la guerra, esta vez en Libia escudándose en una resolución de Naciones Unidas y sin llamar a las cosas por su nombre. Como la presencia de nuestros soldados en Afganistán, donde han muerto un centenar de compatriotas.

Zapatero se creía el líder ejemplar en el que se miraban los demás países europeos. Pero se ha ganado la enemistad de los países de su entorno con desprecios como los ya comentados hacia Sarkozy o la canciller alemana y una política condescendiente con las dictaduras sudamericanas y con las de otros países como Marruecos. En un encuentro con Mohamed VI y posando ante las cámaras se pudo oír a ZP que “la foto es lo más importante”. Suponemos que no lo diría por aquella foto en la que se le veía bajo un mapa con Canarias, Ceuta y Melilla dentro de Marruecos, o aquella con el pañuelo palestino, por no hablar el posado con sus hijas en la Casa Blanca, o en el Foro de Davos con los países con más dificultades económicas, o la que aparece corriendo en la playa sin dejar huella a su paso.

También hay que recordar aquel episodio lamentable de 2003 en el que Zapatero se quedó sentado al paso de la bandera de los Estados Unidos durante el desfile de las fuerzas armadas en el Día de la Hispanidad. Aquella actitud unida a la retirada de las tropas de Irak tensó las relaciones con la primera potencia mundial en cuanto el secretario general del PSOE llegó al Palacio de La Moncloa. El entonces presidente George W. Bush nunca telefoneó a presidente del Gobierno y su primer encuentro se limitó a un “hola, ¿cómo está?”, que le dijo Bush a ZP.

En principio, Zapatero tenía puestas sus esperanzas en que ganaran los demócratas en Estados Unidos y sus relaciones mejoraran. Ganó Barck Obama y el mundo respiró ante la llegada del nuevo Mesías que iba a sacar al mundo de la crisis y la recesión económica, pero nada más lejos de la realidad. Las relaciones entre España y EEUU se suavizan, ya lo dijo Leire Patín: “Sugiero que estén atentos al próximo acontecimiento histórico que se producirá en nuestro planeta. La coincidencia en breves de dos liderazgos progresistas a ambos lados del Atlántico, la presidencia de Obama en Estados Unidos y la presidencia de Zapatero en la Unión Europea en tan sólo unos meses”. Dicho encuentro no llego finalmente hasta que el presidente del Gobierno se fue a rezar a Norteamérica. El 4 de febrero de 2010, José Luis Rodríguez Zapatero citó la Biblia, concretamente “el capítulo 24 del Deuteronomio. No explotarás al jornalero pobre y necesitado”.

A pesar de esto, España seguía al margen de las reuniones y decisiones importantes. Como prueba de ello, aquella imagen de la soledad de Zapatero en la Cumbre de la OTAN el 4 de marzo de 2004. En la Cumbre del Clima de Copenhague pudimos ver la faceta poética del jefe del Ejecutivo. Allí, dijo que “la tierra no pertenece a nadie salvo al viento”.

España había pasado de ser el milagro en el que se fijaban todos los países europeos al crear tres de cada cuatro puestos de trabajo generados en Europa, a ser el principal culpable del incremento del paro en el seno de la Unión.

lunes, 28 de marzo de 2011

ETA nunca miente, Rubalcaba sí

La frase "ETA nunca miente" se le achaca al vicepresidente primero y ministro del Interior, Alfredo Pérez Rubalcaba. Y se le pone en su boca para echar por tierra la autoría de la banda terrorista en los terribles atentados del 11-M después de que ese "hombre de paz", Arnaldo Otegi, dijera que ETA no tenía nada que ver con los atentados.

Las haya dicho o no, lo cierto es que lo revelado hoy por el diario El Mundo dejan en entredicho la ya de por sí débil credibilidad del número 2 del Gobierno. Si ETA nunca miente, Rubalcaba lo hace con excesiva frecuencia.

Los actos confirman las actas

El rotativo de Pedro J. ha convulsionado a todo aquel que lo ha leído y que está al tanto del Caso Faísán y la tregua trampa del año 2006. Ángeles Escrivá publica el acta de negociación de la reunión del 22 junio de 2006, que fue incautada dos años después en Francia al etarra "Thierry". Dicha acta se estructura en ocho puntos que puestos en perspectiva explican los actos que se han sucedido desde aquel día de 2006.

El acta muestra a un Gobierno entregado y plegado a las exigencias de la banda terrorista para que no rompa el alto el fuego. Pero el acta confirma que el Ejecutivo ha mentido a los españoles. Se ha dicho que durante la tregua trampa no hubo cartas de extorsión. Pero el entonces presidente de la Confederación de Empresarios de Navarra, José Manuel Ayesa, denunció que se seguían enviando misivas después del alto el fuego.

Se ha negociado políticamente con ETA. Se ha dicho que las detenciones del Bar Faisán fueron un incidente y que comunicaron a la Policía, Guardia Civil, Ertzaintza y Gerndarmería, que no hubiera más detenciones que entorpecieran la negociación política del Ejecutivo de Zapatero con los pistoleros. De hecho, Joan Mesquida, que por aquella época era el mando único de la Policía y la Benemérita, se atreve a decir que “a los agentes les cuesta mantener la tensión porque no ven al enemigo”.

En el acta se deja ver que se nombró a Alfredo Pérez Rubalcaba para que el proceso no se rompiera y para ello sustituyen al fiscal general de la Audiencia Nacional, Eduardo Fungairiño, por el fiscal Zaragoza. Se sustituye al juez Marlaska que investiga el Caso Faisán por Garzón, al que hacen volver de Nueva York.

Por si esto fuera poco, el acta dice que hay que entender el ropaje con el que se visten algunas declaraciones, que no se puede salir de la mañana a la noche con el discurso real de lo que va a ser el final del proceso, que hay que ir moldeándolo según avancen las cosas, que va dirigido a la clase política, a los que aúllan contra el proceso, pero no va a ser alterada la hoja de ruta. Una semana después, el presidente del Gobierno anuncia en el Congreso, ante la prensa y no ante los diputados, que inicia el proceso de diálogo con la banda terrorista ETA, digamos que por no salirse de la hoja de ruta.

Reacciones

Ante semejante documento, las reacciones no se han hecho esperar. Desde el Gobierno, Zapatero y Rubalcaba callan, y el número dos de Interior, Antonio Camacho, el mismo que prestó su teléfono móvil para dar el chivatazo a ETA, pone en duda la veracidad del acta por venir de la organización terrorista.

El Partido Popular, por su parte, pide la dimisión del vicepresidente del Gobierno y piden que tanto él como el jefe del Ejecutivo comparezcan en el Congreso para explicar lo conocido hoy.

Mucho me temo que ni explicarán lo que hemos conocido ni dimitirán. Eso sí, harán todo lo posible para desmentir los hechos y desviar la atención con alguna de sus habituales cortinas de humo.

sábado, 5 de marzo de 2011

Zapatero no se rinde

Acabo de terminar de ver la intervención del presidente del Gobierno tras la reunión del Comité Federal del PSOE. El anuncio de que Zapatero iba a dirigir unas palabras a los suyos había provocado una gran expectación. Con el debate sucesorio en el aire, parecía que hoy era el día marcado en el calendario en el que el inquilino de La Moncloa iba a dar luz verde a la carrera por sucederle al frente del partido y ¿de España? Pero el gozo en un pozo.

El caso es que el discurso de ZexP ha dejado con un mal sabor de boca al que escribe estas líneas. He de decir que dentro de mi corazón existía la esperanza de que el jefe del Ejecutivo anunciara su dimisión o que adelantara elecciones. Ni lo uno, ni lo otro.

Zapatero ha dicho que el PSOE es "el gran proyecto modernizador y social de España y no vamos a dejar de hacer todo lo necesario por este país". Lo que realmente necesita este país llamado España es un nuevo Gobierno que le saque de este desgobierno. Necesita reformas que nos saquen de la crisis en la que nos ha metido Zapatero y no a base de ocurrencias inútiles que lo único que hacen es restringir las libertades de los ciudadanos. Zapatero, primero negó por activa y por pasiva su existencia para ganar otras elecciones y después esperó a que escampara cuando la tormenta todavía no ha dejado de arreciar sobre nuestras cabezas.

Confío tan poco en Zapatero como en Mariano Rajoy, pero si tiene que ser el presidente del Partido Popular el que devuelva a ZP al lugar del que nunca debió salir, así sea. Pero de momento habrá que esperar a las elecciones autonómicas y municipales para ver si Zapatero se rinde finalmente y pone punto y final a una legislatura que pasará a la historia como la peor de nuestra democracia.

sábado, 26 de febrero de 2011

Declaración de intenciones

Buenos días a todos,

Hace unos días decidí abrir este blog para mostrar mi punto de vista sobre los temas del momento. Como periodista que soy me gusta escribir y me preocupa lo que pasa en nuestro alrededor. Por eso, mi compromiso es hablar de todo: política, economía, actualidad internacional, deportes, espectáculos y todo aquello que me pueda interesar o que crea que le pueda interesar a los lectores.

También me comprometo a que mi blog no sea ni tan "heterodoxo" como "el cuaderno de pepe blanco" ni tenga tantas faltas de ortografía como "el blog de isabel lópez chamosa".

Con esta breve declaración de intenciones doy por inaugurado el blog "temasdelmomento".

Un saludo.